¿Qué hay de nuevo?
Más duró la ida y regreso de Betty en Ecomoda que Uber en “reinventarse” para volver al negocio del transporte de pasajeros con sus socios conductores. Hoy después de 20 días fuera de operación en Colombia Uber regresa con un nuevo modelo de negocio.
A decir verdad, no pasó mucho tiempo luego de que la SIC emitiera un comunicado en el que un juez administrativo determinó que Uber había incurrido en competencia desleal. Para Taxis Libres fue una navidad adelantada, ese 20 de diciembre, pues los operadores de telecomunicaciones debían dejar de transmitir datos a la plataforma.
Hoy, sorpresivamente, al revisar mi bandeja de correo electrónico encontré un correo de Uber en el que menciona: “Creamos un nuevo modelo de negocio para poder operar en Colombia. Este nuevo modelo, que es temporal, te permite llegar a tu destino alquilando un carro con conductor. ¿Cómo? Aceptando un contrato a través de nuestra aplicación con un solo clic”.
Un contrato de arrendamiento
El nuevo modelo de Uber dice ser temporal. El proceso de experiencia de usuario cambió un poco respecto a lo que nos tenía acostumbrados. Ahora será necesario aceptar el contrato de arrendamiento y las opción de selección de vehículo podrá ser hasta por horas.
En sus preguntas frecuentes Uber se refiere a la legalidad del nuevo modelo así: “El modelo de negocio de Uber siempre ha sido legal, muestra de esto es que ha pagado más de 70 mil millones de pesos en impuestos. Estos cambios son legales también, como portal de contacto para las dos partes que alquilan un carro con conductor”.
Usar el servicio requerirá un clic adicional, como lo menciona la misma compañía. Ese clic es para aceptar el contrato de arrendamiento entre las dos partes: Tú como usuario y el conductor como el que presta el servicio.
Esta es una captura de pantalla para un viaje corto en el sector de cañaveral.

¿Y los términos y condiciones?
La plataforma hace una precisión inquietante sobre el objetivo del contrato: “Sirve para que tú como arrendatario asegures que deseas alquilar un carro con conductor por un periodo de tiempo, haciendo uso de la tecnología que como portal de contacto aportamos. Es una formalidad entre ambas partes. Todos los contratos se terminan cuando llegas al destino elegido. Si quieres volver a alquilar otro carro, se genera otro contrato y listo”.
¿Y listo? Sin ser abogado vale la pena cuestionar si dicho contrato puede ser objeto de algún recurso jurídico por parte de usuarios y conductores, según el caso. Y no solo eso, ¿se suma Uber a la misma forma en la que opera Rappi y su modelo de negocio como intermediario?
Ante esto consulté su sección de términos y condiciones. ¡Oh sorpresa! No los actualizan desde diciembre. Ahí mismo aún aparecen los antiguos servicios como Uber Black o Uber X, como se muestra a continuación.


Significa esto ¿un intermediario entre dos partes sin ninguna responsabilidad legal? ¿Cuál es si aplica? ¿Quién responde cuando hay un accidente?
Falta ver qué dice el gobierno, cómo van a responder los operadores ante lo que plantea Uber y si se darán sanciones a las que haya lugar, si es que las hay, sobre la nueva forma de operar.
Amanecerá y veremos.