Durante los procesos de reclutamiento en las empresas, estas buscan atraer la mayor cantidad de talento que les permita desarrollar sus proyectos. Aplicaciones como Rappi valoran y conservan su talento debido a la complejidad de su operación. Compiten en el mercado laboral por los mejores. Sin embargo, ¿por qué lo mejor del talento de una empresa renuncia y decide ser independiente?
Una encuesta hecha por la consultora EY Colombia y revelada por el diario Portafolio afirma que 9 de cada 10 colombianos están dispuestos a trabajar en su emprendimiento. De igual manera, el informe Global Entrepreneurship Monitor 2018-2019 señala que la actividad empresarial en el país se encuentra por encima del 20% durante el 2018.
Lo anterior podría ser el resultado de jóvenes emprendedores o empleados que buscan otro rumbo. Si bien es complejo determinar las razones exactas de la fuga de talento, existen motivaciones relacionadas con la satisfacción personal y la remuneración según el género que terminarían por hacer que un empleado renuncie.
El balance entre brindar un servicio de calidad y la flexibilidad en el manejo del tiempo produce satisfacción personal. Según una encuesta, realizada por la Universidad de Harvard, la consultora Eden McCallum y la Escuela de Negocios de Londres; el 90% de los encuestados se hizo independiente por voluntad propia y reportaron sentirse más gratificados con el trabajo que estaban haciendo así como la percepción de mejor servicio al cliente que cuando estaban en su anterior empleo. En entrevista para el mismo estudio, Tonias Vetter afirmó que compartir intereses e involucrarse en proyectos gratificantes se daba en su vida como consultor independiente que en su anterior rol.
La presencia de la mujer también sobresale, uno de los motivos que, revela la encuesta, es que ser independiente puede resolver de cierta manera la brecha salarial en favor de la mujer. Según la OIT en su informe mundial sobre salarios 2018-2019, muestra que la disparidad entre salarios de hombres y mujeres se encuentra entre 16% y 19%. En su lugar, la encuesta mostró que, para la muestra tomada, la diferencia salarial pasaba del 28% en firmas tradicionales, a cerca del 3% como independiente.
Es necesario hacer énfasis en que trabajar como independiente provee ventajas como las anteriormente expuestas. Sin embargo, la incertidumbre, inestabilidad y falta de beneficios legales están a la orden del día. No está mal querer ser independiente o permanecer en una empresa, al final la decisión corresponde a la sensación de bienestar del individuo. Considero que el reto lo tiene el empleador para retener el talento que compone su empresa. Puede que parte de la solución no solo sea la flexibilidad en el trabajo sino en la posibilidad de escoger en qué proyectos trabajar, cuándo y cómo hacerlo.